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El Camero Viejo, situado en La Rioja Media, es una fascinante subcomarca que forma parte de la región de Sierra, ofreciendo una geografía diversa y cautivadora. Sus municipios se extienden a lo largo del valle del río Leza y sus afluentes, entre las imponentes sierras que delimitan los valles del Iregua y del Jubera-Cidacos. Este territorio se caracteriza por un relieve que oscila entre suaves formas en las cimas y laderas más pronunciadas en el fondo del valle, donde el Cañón del Leza muestra cortados rocosos y terrenos abruptos hacia la depresión del Ebro. Con altitudes que van desde los 700 hasta los 1700 metros, el Camero Viejo experimenta notables variaciones climáticas y de vegetación a lo largo de su extensión.
La historia humana se entrelaza con la geografía de esta región, dejando una huella palpable en su paisaje. Las progresivas roturaciones en busca de pastos y las diversas modificaciones del terreno para la agricultura han dejado marcas visibles, aunque aún se pueden apreciar pequeñas áreas boscosas que sobrevivieron a la tala indiscriminada. Este equilibrio entre la intervención humana y la naturaleza es parte de la identidad del Camero Viejo, donde la actividad agrícola y ganadera ha moldeado el terreno a lo largo de los siglos. Además, la riqueza paisajística de la región atrae a visitantes en busca de experiencias naturales únicas y paisajes impresionantes.
Desde los antiguos bosques de frondosas hasta los campos cultivados y los espacios naturales protegidos, el Camero Viejo ofrece una amplia gama de entornos para explorar y disfrutar. Sus municipios, con su encanto rural y su rica historia, invitan a los visitantes a sumergirse en la vida cotidiana de la región y a descubrir sus tradiciones y costumbres únicas. Con una combinación única de historia, cultura y naturaleza, el Camero Viejo se presenta como un destino cautivador para aquellos que buscan escapar de la rutina y conectar con la belleza del entorno natural.
El Camero Nuevo, una región de La Rioja, se distingue por sus imponentes montañas y hermosos valles, enmarcados por las majestuosas sierras del Camero Nuevo, Serradero y Moncalvillo al oeste. Estas cadenas montañosas actúan como límites naturales con el valle del Najerilla al norte y delimitan el valle del Iregua al este, separándolo de la sierra del Camero Viejo y del Hayedo de Santiago. La confluencia de estos valles se produce en la cabecera, donde la sierra de Cebollera da origen al río Iregua, entre las colinas septentrionales de la cordillera que conecta la Sierra Cebollera con el Castillo de Vinuesa. Este entorno se caracteriza por sus montañas amplias y despejadas, con extensos prados y densos bosques de hayas, mientras que en la región de Cebollera sobresalen los impresionantes pinares.
En el Camero Nuevo se alzan imponentes picos que dominan el paisaje, como el Cebollera, el Castillo de Vinuesa, Terrazas, El Cabezo, San Cristóbal, Mojón Alto o el Serradero. Estas alturas ofrecen vistas panorámicas espectaculares y son destinos populares para excursionistas y amantes de la naturaleza en busca de desafíos y paisajes excepcionales. Además, la ubicación estratégica del Camero Nuevo lo sitúa en un punto clave, limitando al sur con Soria y sus comarcas de Pinares, El Valle y La Vega Cintora, al este con el valle del Leza, y al oeste con el valle del Najerilla y su comarca del Alto Najerilla. Su extremo norte llega hasta las rocas de Viguera, marcando así sus límites con una geografía diversa y cautivadora.
Las comarcas de Camero, tanto el Camero Viejo como el Camero Nuevo, destacan por la belleza y diversidad de su paisaje montañoso, sus valles profundos y sus imponentes sierras. Estos territorios ofrecen una rica variedad de actividades al aire libre, como senderismo, escalada y observación de la naturaleza, así como un entorno ideal para aquellos que buscan alejarse del bullicio de la ciudad y conectar con la tranquilidad de la naturaleza. Además, su ubicación estratégica en La Rioja les confiere un encanto especial, al estar rodeados de otras regiones igualmente fascinantes como el valle del Najerilla y el valle del Leza. En resumen, las comarcas de Camero son destinos imprescindibles para los amantes de la montaña y la aventura, ofreciendo experiencias únicas y paisajes inolvidables para todos aquellos que se aventuren a descubrirlos.
